http://4.bp.blogspot.com/-BBdkBsYvSZo/VJjqAefrFJI/AAAAAAAAArc/4xLs46JI8iw/s1600/DATA-CENTER.png http://4.bp.blogspot.com/-t7v0570o4gc/VnCIzDOXrWI/AAAAAAAAA5g/yR_SrSyCn-Q/s1600/mercado-secreto-ganar-dinero-en-mercadolibre-obsequio-105901-MLV20446560206_102015-O2.jpg http://4.bp.blogspot.com/-qOc_1xv2VSE/Vm4n2pyezUI/AAAAAAAAA3E/Olz7vlMunUc/s1600/Vivir%2Bde%2Bla%2Bcompra%2Bventa.jpg   http://3.bp.blogspot.com/-XsM8_v8sPH0/VnOHdL1AeQI/AAAAAAAAA78/o--SlxzF1CA/s1600/Mi%2BNegocio2.jpg  

Translate

7) SANA TU ESTOMAGO - Quince recetas para fortalecer tu estómago.

Jugo de zanahoria, apio y espinacas
Si quieres dotar de salud la mucosa del sistema digestivo este licuado
es fundamental. Tomando esta mezcla durante dos o tres veces a la
semana evitas acidez y proteges al estómago contra alimentos
irritantes.




Vas a necesitar dos zanahorias grandes, cuatro tallos de apio y dos
tazas de espinacas. Para hacer el licuado:
Primero pela las zanahorias y junto al apio y a las espinacas,
lávalas en agua.
Echa todos los elementos en la licuadora hasta que quede
líquida la mezcla.

Licuado de plátano con papaya
Ya he mencionado antes las propiedades beneficiosas para nuestro
organismo de estas dos frutas. Es un gran alimento cuando queremos
reponer fuerzas tras hacer deporte.
Los ingredientes que vas a necesitar son: media papaya pelada, un
plátano, un yogur natural, media taza de leche de coco o de arroz y
una cucharada de miel.
Mete todos los ingredientes en una licuadora y listo. Si notas que
queda demasiado espeso, añade más leche o agua hasta que esté a
tu gusto.

Ensalada de escarola, salmón, aguacate y
chucrut
Puede parecer complicada de elaborar pero la realidad es que no hay
nada más sencillo que una ensalada para asestar un buen golpe a tus
dolores estomacales. Con esta ensalada puedes mejorar enormemente
la salud de tu estómago y de cualquier úlcera. Todos sus elementos
son antiinflamatorios y reúne otras propiedades como micronutrientes
reparadores.
Vas a necesitar para dos personas: una lechuga entera de escarola,
un brócoli entero cocido, chucrut (col fermentada), un aguacate entero,
250 gramos de salmón ahumado, 30 gramos de pasas, cebolla, ajo y
aceite de oliva virgen extra.
El diseño es súper fácil.
Pon a cocer el brócoli hasta que quede blando y de color
verde llamativo.
Una vez cocido, cuélalo.
Pela el aguacate y trocéalo.
Acto seguido trocea el salmón ahumado en pequeñas tiras.
Haz lo mismo con la cebolla.
Corta en trozos generosos la escarola y ten a mano ajo en
polvo, el chucrut y las pasas.
Tras la preparación de todos los elementos, añádelos a un
cuenco profundo y mezcla bien los alimentos.
Echa sal y aceite de oliva al gusto. Personalmente el ajo lo
suelo echar por encima, espolvoreado. Si te gusta mucho
este, puedes hacer lo mismo. Si no te gusta el sabor tan
fuerte, prueba con cúrcuma o jengibre en polvo. Tampoco es
mala idea añadir cayena, eso sí, puede que no de un gran
sabor a la ensalada.
Patata cocida recalentada con rodajas de
tomate y atún


Se trata de algo muy simple, pero a la vez potenciador para la salud
digestiva de tu cuerpo.
Vas a necesitar: una patata grande, un tomate entero, dos latas de atún
en aceite de oliva, sal y una cucharada de aceite de oliva virgen extra.
Lo primero de todo cuece una patata.
Una vez que puedas atravesarla fácilmente con un cuchillo,
déjala enfriar ya fuera del agua de cocción. Guárdala en la
nevera.
Cuando ya esté fría, pela la patata y córtala en cuadrados
pequeños.
Tras esto, ponla a calentar al horno.
Una vez tengas la patata bien caliente, parte el tomate en
rodajas, vierte dos latas de atún en un plato ancho y deja
caer los trozos de patata recalentada por encima de ellos.
Echa aceite por encima y una pizca de sal.
Como consejo, yo suelo dejar la patata cocida desde por la mañana en
la nevera (o la noche anterior) así ahorro tiempo de cocinado ya que
tan sólo hay que recalentarla. En capítulos anteriores mencioné la
importancia de consumir almidón resistente para nuestro sistema
digestivo y esta es una gran manera de hacerlo.

Puré de brócoli
dealpara acompañar carnes y pescados. Es un perfecto y sencillo
acompañante. Los ingredientes son: 300 gramos de brócoli, un yogur
natural, una pizca de sal y otra de pimienta negra molida.
Para empezar corta el brócoli en pequeños trozos y cuécelo
durante 10 minutos son algo de aceite y sal.
Ya cocido, insértalo en una licuadora o batidora junto al
yogur la pimienta y la sal y lícualo.

Tortitas de brócoli
Perfectas para un desayuno completo con proteína, grasas y
carbohidrato. Existen pocas cosas con más equilibrio nutricional para
desayunar saludablemente que esta. Aunque también es una buena
opción para cenar.
Los ingredientes: dos huevos, 200 gramos de brócoli, 50 gramos de
queso de rulo de cabra, un trozo de mantequilla y sal.
Lo primero de todo es hervir el brócoli.
Tras esto córtalo en trozos y deja que se enfríe.
Funde en el microondas una pizca el queso de cabra.
En un bol bate los dos huevos, añade el queso fundido y
mezcla bien.
Una vez bien mezclado añade los trozos de brócoli y forma
pequeñas bolas con la masa que se forme. Aplástalas hasta
que queden como una tortita.
Cuando tengas ya suficientes tortitas, añade mantequilla a
una sartén y mantenlas al fuego unos instantes.

Gachas de avena con plátano, leche de cabra y miel
Este plato es ideal si vas a hacer mucha actividad a lo largo del día y
quieres tener suficiente energía. Recomiendo su consumo como
desayuno. Los ingredientes son: un plátano, 80 gramos de avena, una
cucharada de miel, una cucharada de canela, un vaso de leche de
cabra y una pizca de sal.
Antes de nada, la noche anterior o bien tres horas antes de
consumir la avena, mantenla en remojo en un vasito de
agua. Esto hace que se eliminen parte de los antinutrientes
como el ácido fítico que suele presentar este cereal.
Ahora sí, cuela la avena y escúrrela bien.
Pon la cazuela a calentar con la leche ya dentro.
Acto seguido añade la avena escurrida y espera a que la
leche empiece a hervir sólo un poco.
Cuando la avena quede ya como pastosa, añade la miel y
una pizca de sal
(Si eres intolerante a la lactosa utiliza agua porque también
está tremendamente delicioso)
Una vez esté la avena pastosa, retira toda la mezcla a un
bol. Corta el plátano en rodajas y déjalas caer sobre el bol.
Acto seguido añade canela a los trozos de plátano por
encima.

Salmón a la plancha con romero y brócoli
Exquisito plato para comer, disfrutar y sanar. Vas a necesitar: una o dos
rodajas generosas de salmón fresco de pescadería, romero en polvo,
sal, mantequilla y 200 gramos de brócoli.
Primero cueces en trozos el brócoli durante 10 minutos hasta
que esté blando.
Lo cuelas y dejas enfriar un poco.
Acto seguido, añadimos un trozo de mantequilla a la sartén y
dejamos que caliente.
Ya calentado, añadimos el salmón. Antes de añadirlo, lo
rociaremos con un poco de romero y sal por ambos lados del
filete.
Tras insertarlo, doramos el salmón vuelta y vuelta hasta que
coja un color rojizo.
Deja los filetes de salmón en un plato y añade por los
laterales el brócoli. Puedes añadir limón al salmón si lo
deseas, incluso ajo en polvo.

Espárragos verdes horneados con bacon.
Vas a necesitar una bandeja de espárragos verdes, unos 12 o 15. Seis
o siete lonchas de Bacon y aceite de oliva.
Para empezar, deja el horno encendido a 180 grados.
Después lava los espárragos y corta la parte más dura de
ellos.
Acto seguido corta las lonchas de bacon por la mitad.
Ahora, enrolla la loncha de bacon sobre el espárrago y
deposítalo en una bandeja de horno con papel de aluminio
por debajo.
Haz este proceso con todos los espárragos y una vez los
tengas alineados en la bandeja para hornear, echa un
chorrito de aceite de oliva por encima de todos.
Deja la bandeja dentro del horno por 20 minutos y
comprueba de vez en cuando si los espárragos están
blandos y si el bacon está dorado.
También puedes usar jamón serrano si quieres comer
proteína con menos grasa.

Yogur natural con fresas
Así de sencillo. Los ingredientes que vas a necesitar: un yogur natural
sin azúcar, 150 gramos de fresas, canela y miel.
Vierte el contenido del yogur sobre un bol.
Acto seguido lava las fresas y pícalas en cuadraditos o en
triángulos.
Échalas por encima del yogur.
Después añade una cucharadita de miel y otra de canela.
Remueve bien todos los ingredientes en el bol y listo.
Licuado de patata cruda, manzana, apio y
brócoli

Hay pocos licuados que limpie y desinflame más que este. Para hacerlo
vas a necesitar una patata grande pelada, una manzana, 4 ramas de
apio y la mitad de un brócoli.
Parte en cuatro partes y lava la manzana con la piel.
Lava el apio y corta en tallos el brócoli.
Lava la patata pelada y añádela junto a todos los demás a la
licuadora.
Bébelo rápido porque las propiedades de la patata cruda
desaparecen pronto.

Puré de calabacín, puerros y patata

Ingredientes: una patata grande, un calabacín, dos puerros, media
cebolla, pimienta negra y sal.
Para empezar, calentamos el agua de una olla con una pizca
de sal y aceite de oliva.
Cuando el agua esté hirviendo dejamos reposar en él los
vegetales.
Después, pelamos la patata en trozos, la cebolla quitándole
la piel, los puerros y el calabacín.
Acto seguido lo echamos todo a la olla hirviendo.
Dejamos que se cueza todo durante 45 minutos y después
pasamos todos los vegetales bien cocidos a una batidora.
Batimos bien todos los alimentos y nos quedará el puré.

Sardinas al limón
Personalmente opino que no hay muchos más platos con grasa tan
beneficiosa y tanta proteína de manera natural. Esta es una excelente
opción.
Ingredientes: idealmente 7 o 8 sardinas de pescadería, un limón y sal.
Primero limpia las sardinas.
Quítales la cabeza.
Mantén una sartén en caliente, con una pizca de mantequilla
y pon las sardinas encima. Espera a que se doren por
ambos lados y acto seguido pásalas a un plato.
Riega el plato de sardinas con abundante limón.

Aguacate con huevo y bacon
Ingredientes: para unas dos personas: 4 aguacates, 8 huevos
pequeños y 150 gramos de bacon.
Lo primero de todo es cocinar el bacon. Para ello primero lo
cortaremos en trozos pequeños sobre mantequilla.
Acto seguido, partimos los aguacates por la mitad y
extraemos el hueso.
Raspamos un poco para dejar un hueco en el que podamos
insertar bacon y el huevo entero.
Una vez insertados ambos alimentos, metemos las rodajas
de aguacate dentro del microondas a una potencia
adecuada para que consiga crear la clara durante dos
minutos.
Si el microondas no os da confianza, utilizad el horno a 180º
pero sin cocinar el bacon antes.
Una vez hecho esto, cuando esté algo fría la piel del
aguacate, recomiendo pelarlo y consumirlo tal cual. Otra
opción es consumirlo a cucharadas.

Pastel de verduras
Este es un verdadero manjar para niños y adultos. Es una gran
apuesta si quieres sorprender a algún ser querido de manera sana. Es
ideal para acompañar carnes y pescados.
Vas a necesitar: un calabacín, tres zanahorias, 150 gramos de
guisantes, 150 gramos de judías verdes, una cebolla, 4 huevos, 200
mililitros de nata líquida para cocinar, aceite de oliva virgen extra y
pimienta negra.
Para empezar, lavamos y pelamos el calabacín y la cebolla.
Acto seguido los cortamos en trozos y los dejamos dorar en
una sartén con aceite de oliva.
Por otra parte, lavamos y pelamos la zanahoria.
La cortamos en dados pequeños y la cocemos junto a los
guisantes y a las judías verdes.
Por último, preparamos un bol con nata líquida, los huevos,
la sal y la pimienta.
A esta mezcla añade la cebolla y el calabacín ya dorados y
las verduras cocidas y coladas.
Encendemos y dejamos el horno a 160º. Ahora sí, vertemos
la mezcla en un molde. Recomiendo untar de mantequilla el
molde para que no se quede pegado el pastel luego.
Después colocamos esta bandeja a media altura en el horno
por unos 45 minutos.


6) SANA TU ESTOMAGO - Alimentos importantes

En este grupo se incluyen los alimentos que son importantes y
beneficiosos para curar una gastritis y mejorar tu salud, pero no tan
imprescindibles como los anteriores. Eso sí, yo los iría añadiendo a tu
dieta día tras día hasta que sean parte de tu costumbre.

Té de hueso de aguacate
Para comenzar, y lo más importante, es que es astringente. Por lo que
es perfecto para las inflamaciones del tracto gastrointestinal.
Este té es desconocido, a la vez de brutal. Para empezar, es
revitalizante. Reduce la fatiga deportiva aumentando tu lívido. Aparte
tiene un alto contenido en flavonoides por lo que es beneficioso para
prevenir el crecimiento de tumores.
Tiene un gran poder antioxidante. Además de ayudarte a quemar
grasa y a adelgazar puede ayudarte a combatir enfermedades que
impliquen a microbios o parásitos.
Si tienes el colesterol bastante alto, te ayuda a reducirlo. Mientras que,
si padeces asma, puede ser un buen complemento natural para
tratarla.




Por último, para los preocupados/ preocupadas por su imagen, hay
que saber que tomar este té regularmente tiene un efecto
rejuvenecedor en la piel favoreciendo la creación de colágeno.
Para consumirlo: ralla las semillas del aguacate. Quedará como una
masa de polvos. Esos polvos serán la hierba de tu bolsita de té.
Calienta agua. Vierte la cantidad que consideres. Dos cucharadas
será suficiente para un día. Deja que repose y caliente bien el hueso
de aguacate. Cuela estas hierbas con un colador y bébete el té.

Manzanilla

Su gran baza es que es un potente antiinflamatorio. Aparte no es un
buen compañero de las bacterias que rondan nuestro organismo. A su
favor tiene que ha sido utilizada desde la antigüedad para combatir
dolores y problemas digestivos. Y esto es así porque ayuda en la
reparación de las mucosas del estómago.
Favorece la digestión, reduciendo la inflamación de nuestro tracto.
Personalmente opino que la manzanilla natural es mucho más potente
que la que nos venden en supermercados. Si no puedes optar a ella,
echa en tu taza unas tres bolsitas.

Cúrcuma

La cúrcuma es una especia que puedes obtener en cualquier
supermercado. Les da un tono amarillento a los alimentos. Yo la suelo
utilizar con carnes y pescados. Su sabor es agradable. Pero esto no es
lo mejor de esta especia.
Al igual que la manzanilla es un potente antiinflamatorio. Ayuda a
equilibrar nuestra flora intestinal y disminuye la inflamación del
intestino. Reduce los gases gástricos y es un elemento muy útil para
tratar gastritis y en especial el síndrome del colon irritable.
Es un arma potente para eliminar la bacteria helycobacter pilory.
Lo puedes consumir con la comida, o bien en té. Actualmente, muchos
herbolarios venden cúrcuma en bolsitas de té. Así que como prefieras,
pero consúmela. Tu estómago te lo agradecerá.

Diente de león
Se trata de otra infusión. Ayuda a mejorar la digestión aumentando la
secreción de glándulas digestivas. Es sobretodo depurativo. Ayuda a
fortalecer el estómago y el intestino.
Se puede consumir como verdura o como té. Personalmente, en forma
de verdura no la he consumido nunca. Pero si puedes comerla de esta
forma mejor, sus efectos serán mayores.
Mantiene un correcto funcionamiento del hígado. Previene
hemorragias internas. Ayuda a disminuir el peso corporal y ayuda a
mejorar la vista.

Cebolla y ajo
a cebolla y el ajo son buenas fuentes de alicicna, un componente
importante a la hora de tratar ciertas gastritis, como las atróficas o
provocadas por H. pylori.
Hay estudios científicos que demuestran cómo la alicina contribuye a
sacar la gastritis. Por ejemplo, un estudio científico llevado a cabo en
1997 concluyó que los resultados mostraron la eliminación de
Helicobacter pylóri en el 71 por ciento de pacientes que recibieron
alicina.
La alicina reduce la cantidad de nitrito gástrico e inhibe el papel de las
bacterias reductoras de nitrato. Por lo que mejora los síntomas de la
gastrítis.

Cayena y Chile
Muy diversos estudios científicos han llegado a la misma conclusión, la
capsaicina presente en la Cayena o el Chile ataca a Helicobacter
Pylori. Así que si tu médico te ha detectado esta bacteria, no dudes en
incluir estos alimentos en tu dieta, pero sin pasarte, que todo en
exceso es malo, y los picantes también.
En la mayoría de los estudios, la capsaicina inhibió la secreción de
ácido gástrico. Estudios más recientes además proporcionan evidencia
a favor de un efecto beneficioso de la capsaicina en la mucosa
gástrica.

Copos de avena
Aparte de ser una gran fuente de carbohidratos para los días de
entrenamiento, la avena desinflama la mucosa gástrica. Facilita el
tránsito intestinal ayudando a digerir mejor lo que comemos. Su alto
contenido en fibra ayuda de forma importante en este tránsito.
Más adelante incluyo una receta personal de un porridge delicioso de
copos de avena que sin duda van a darte energía, placer y vitalidad.
La avena es un alimento muy completo y también a nivel mental. Está
demostrado que reduce el cansancio y la fatiga. Además, es un
alimento muy saciante y con mucha fibra por lo que, si tu objetivo es
también perder peso es una buena baza.

Zanahorias crudas o cocidas
Son potentes protectores del estómago. Poca gente sabe que son
grandes antinflamatorios y que aportan reducción del ardor y de la
acidez estomacal.
Aparte ayuda a mejorar la salud de la mucosa del sistema digestivo,
evitando la acidez y también de los alimentos altamente irritantes.
El consumo habitual de zanahorias impide y disminuye las
intoxicaciones alimentarias como por ejemplo la listeriosis. También se
puede hacer zumo. Beber zanahoria licuada ayuda a eliminar
lombrices intestinales.
Por último, considero relevante mencionar que la ingestión de este
vegetal, favorece la regulación intestinal, lo que puede ayudar a
prevenir el cáncer de colon. Es un laxante natural, y puede ayudar a
evitar el estreñimiento.

Papaya
La papaya bien masticada después de la comida, es una de las frutas
más potentes del planeta para ayudar a hacer digestiones pesadas
como las famosas comidas de navidad o de empresa.
La papaya tiene propiedades astringentes. Es digestiva, antioxidante,
antiséptico, cicatrizante y laxante.
Es un alimento muy recomendable para tratar la gastritis ya que mejora
la digestión, las úlceras gástricas y los problemas de hígado entre otras
muchas cosas más. Otras muchas cosas más como los granos, las
manchas en la piel, los hongos…
En cuanto a lo que nos interesa, es importante saber que favorece la
eliminación del cuerpo de parásitos intestinales. Aparte, reduce el
dolor y la inflamación del estómago.

5) SANA TU ESTOMAGO - Alimentos imprescindibles

En cuanto a los alimentos que considero imprescindible aumentar para
la sanación, son los siguientes:

Patata
La patata es un alimento muy completo. La patata cocida, enfriada, y
recalentada, tiene propiedades increíbles para nuestra flora intestinal.
Gracias a su enfriamiento, se forma lo que se conoce como almidón
resistente, que tiene propiedades fantásticas para tu sistema digestivo.
Aunque ya de por sí la patata incluye múltiples beneficios, recalentarla
le va a otorgar una potencia brutal a este alimento derivando en tres
áreas: mejora del metabolismo, del intestino, ayuda a perder peso.




También el jugo de patata es recomendable. Un licuado de patata
cruda nada más despertar y en ayunas es una gran ayuda sobre todo
tras los primeros días de diagnóstico. Tómalo durante 15 días seguidos
y comprueba sus efectos. Tiene un poder desinflamante brutal.

Plátano (maduro o no)
El plátano también es un tipo de almidón beneficioso para nuestro
estómago. Aunque muchos lo catalogan como una simple fruta.
Este alimento contiene un principio anti ulceroso bioflavonoide: el
leucocyanidin. Este elemento se ha demostrado como un componente
fundamental para la cicatrización de la mucosa gástrica.
El plátano verde también se vende en forma de polvo. Pues bien, se ha
comprobado que el polvo de plátano verde es un remedio muy eficaz
para el tratamiento de la úlcera péptica. Lo puedes encontrar en
herbolarios.

Arroz blanco de grano fino
Este alimento es fundamental porque es fácil de digerir. Además, no
contiene gluten. Otros muchos cereales sí. La forma ideal de consumirlo
es la misma de la patata, cocido, enfriado y recalentado, por la misma
razón.
Recomiendo consumirlo con grasas sanas procedentes de pescado o
de carnes animales blancas para que no eleve de golpe drásticamente
los niveles de azúcar en sangre, algo que a la larga no nos conviene.
Otra muy buena opción es consumirlo cuando hagas deporte. Después
de hacerlo.
Aunque el punto álgido es el siguiente. Consumir el agua que sobra al
cocer el arroz te proporciona una hidratación fundamental para las
primeras etapas en úlceras y gastritis.

Vegetales verdes (acelgas, espinacas,
brócoli)
La principal ventaja de incluirlos y aumentarlos en tu consumo es
porque ayuda a prevenir enfermedades gastrointestinales o a que se
desarrollen más. Enfermedades que pueden ser cáncer de estómago y
colon.
Los vegetales los recomiendo consumir más adelante, sin estar en la
fase de crisis. La fibra de estos alimentos es beneficiosa, pero si notas
problemas en el estómago al tomar algún vegetal, sustitúyelo por otro.
Contienen la mayoría inmensas cantidades de nutrientes por caloría, lo
que los hace elementos ideales y los sitúa en lo que debería ser la
base de nuestra alimentación. Personalmente recomiendo un consumo
abundante a diario de estos vegetales ya que presentan un índice
glucémico bajo. Es importante comer mucha cantidad porque nos
mantendrá saciados y nos aportarán fibra.
Además, contienen gran cantidad de vitamina A, la cual interviene en la
reparación de heridas o tejidos infectados. Aparte, también mejora la
resistencia hacia las enfermedades contagiosas y las infecciones.

Aguacate
El aguacate es muy beneficioso en muchos sentidos. Tiene
propiedades importantes para el sistema nervioso, cardiovascular y
para la piel. Esto se debe a que contiene mucha piridoxina(vitamina
b6). Aparte su alto contenido en grasa y fibra produce un efecto
saciante que puede protegernos de posibles empachos innecesarios.
Se sabe que es beneficioso para la memoria, la hiperactividad o el
estrés y para enfermedades degenerativas. Ayuda a prevenir
enfermedades cardiovasculares gracias a su alto contenido en
vitamina E y en glutatión.
En cuanto a lo que nos interesa, debido a las grasas que contiene
tiene la capacidad de aliviar la acidez de estómago y las úlceras.
Aparte es un potente desinflamatorio digestivo. Medio aguacate diario
será suficiente. Aunque es complicado resistirse a la tentación de
comerse uno entero.

Huevos

El huevo es otro alimento muy importante. Contiene muchísimos
nutrientes: proteínas, aminoácidos, minerales y vitaminas.
Es bueno para las úlceras estomacales ya que la clara del huevo
participa activamente en la secreción de ácidos del estómago.
Hay un falso mito de que el huevo tiene mucho colesterol. Cierto, el
huevo tiene colesterol, el error viene en pensar que ese colesterol
ingerido provoca un aumento del colesterol malo en sangre, lo que se
ha demostrado en numerosos y abundantes estudios que no es cierto.
El huevo es uno de los alimentos fácilmente accesibles más completos
que podemos encontrar. Eso sí, es importante consumir huevos de
calidad, de gallinas criadas al aire libre, que se muevan, y con una
buena alimentación. Si tienes alguna pequeña población cercana
seguro que los puedes encontrar, si no, tendrás que recurrir a
consumir huevos de supermercado, en donde deberás elegir entre
huevos ecológicos (cuyo etiquetado en la cáscara comienza por un 0),
o huevos camperos (cuyo etiquetado comienza por 1), los huevos cuyo
etiquetado comienza por 3 mejor alejarse de ellos, se trata de gallinas
encerradas toda su vida, que no han visto el sol, y no se han movido,
simplemente ponte en su situación, busca en Google imágenes y
compara, además este tipo de huevos tiene por ejemplo peores grasas,
menos Omega 3 que un huevo de calidad etc.
El huevo es un alimento muy completo para los resfriados gracias al
zinc que contiene. Dicho esto, este mismo elemento es el responsable
de evitar el cáncer de próstata ya que inhibe la producción de ciertas
hormonas cancerígenas.
Además, para personas intolerantes a la lactosa que no sepan bien de
donde obtener el hierro, el huevo es una gran fuente de este.

Yogur natural (si quieres con miel)
Este alimento aporta una gran cantidad de bacterias beneficiosas para
realizar correctamente la digestión. Aparte, equilibra nuestra flora
intestinal. Obviamente si eres un gran intolerante a la lactosa no te lo
recomiendo, pero si eres alguien normal sí.
Contiene vitaminas del complejo B, al igual que el huevo.
La leche de cabra, o lácteos procedentes de la cabra son también
buenas fuentes de protección frente a la gastritis. Esto se debe a que
metabolizamos mucho mejor la leche de este animal que la de la vaca.
Participa en el fortalecimiento de la flora de manera óptima.
Prioriza estos alimentos siempre de origen natural o ecológico lo
máximo posible. Es decir, leche de cabra fresca frente a UHT, aunque
es difícil de encontrar hoy en día.

4) SANA TU ESTOMAGO - ¿CÓMO SANAR? LO QUE DEBES SABER.

Que a tu vecino le funcionan muy bien unos alimentos y no otros no
significa que a tí también. Por eso sobretodo te propongo experimentar.
Experimenta con todos los alimentos que voy a mencionarte e
incorpora los que de verdad te sienten bien. Es importante que
compruebes tu mismo qué te beneficia y que no. Por ello recomiendo
incluir durante una semana un alimento nuevo y reducir otro para
poder comprobar resultados. Esta es la única manera de curarte,
experimentando qué necesita tu cuerpo, y no haciendo lo que dicen
que es sano o no.




Bien. Curar, sanar, revertir una gastritis que lleva años conviviendo
contigo no es fácil. Ya te aviso de que será duro. Sobre todo al
principio. Abandonar ciertos alimentos que han formado parte de tu
vida durante tanto tiempo es difícil. Dejar de comer algunas de esas
sabrosísimas galletas del supermercado, o aquellas comidas
interminables que hacía nuestra madre es muy duro. Créeme, he
pasado por eso.
Para empezar, lo que yo propongo es un aumento y un descenso de
alimentos. No propongo una dieta. Propongo un aumento del consumo
de ciertos alimentos y un descenso de otros o incluso la eliminación.
Aumenta ciertos alimentos,
disminuye/suprime/sustituye otros.
Primero, voy a comenzar con lo que debemos reducir o eliminar. En este
grupo se incluyen los 7 elementos que he mencionado en el capítulo
anterior. Sin excepciones. Sin eso no vas a ir a ningún lado, avisado
estás.
En cuanto a los alimentos que considero imprescindibles aumentar
para la sanación, son los siguientes. Ahora sólo los nombraré de
pasada. En el próximo capítulo profundizaré en ellos.
Los alimentos a aumentar son: almidones como la patata, el arroz, el
plátano. Por otra parte, importantísimo es el consumo de vegetales
verdes, el aguacate, el huevo y el yogur natural sin azúcar. Las frutas
altas en fibra soluble tampoco están de más.
En cuanto a sustituir, propongo un endulzante que a mí personalmente
me va muy bien. Soy un adicto al azúcar, lo confieso. Por eso me costó
integrar este cambio. Hablo de la miel. Endulza tus postres si antes lo
hacías con azúcar, con miel. El yogur natural con miel es un postre
súper sencillo y delicioso.
Quiero que sepas que no pasa nada porque pruebes. Me refiero a que
vas a recaer. Vas a volver a tomar café. Vas a volver a tomar galletas de
chocolate de supermercado. Lo vas a hacer porque a mí me ha pasado
y me pasa. Lo importante en esos momentos es que lo hagas y punto.
Acéptalo, trata de disfrutar de esos alimentos poco sanos, y cada vez
verás como te es más difícil.
Te propongo que de vez en cuando, si no puedes aguantar la
tentación, pruebes aquel donuts, aquél café doble para que
compruebes que pasa con tu cuerpo. Para que veas el efecto que
tienen ahora esos alimentos una vez que llevas tiempo ingiriendo
comida de verdad.
Es divertido como nuestro cuerpo empieza a dar señales de que ciertos
alimentos que han estado siempre en nuestra vida empiezan a ser
molestos. A mi me pasa en especial con el café y con el pan blanco.
Como conclusión, come más alimentos de los que ahora pasaré a
hablar pero si algun día necesitas comer comida basura. Pero si te
quieres, vuelve al día siguiente a tu rutina normal. Si eres capaz de
pasar de esos alimentos perjudiciales, mucho mejor. Te recuperarás
mucho antes. Así de simple.

3) SANA TU ESTOMAGO ¿QUÉ TE ESTÁ DAÑANDO?

2. ¿QUÉ TE ESTÁ DAÑANDO?
Este es un apartado al que debes prestar mucha atención. Voy a pasar
a mencionar los alimentos y hábitos que más pueden boicotearte a la
hora de sanar tus problemas de estómago y voy a explicarte por qué.
Tenemos la mala costumbre de establecer hábitos automáticamente
porque nos hacen sentir bien durante un breve periodo de tiempo.




Esto sucede mucho. Y es complicado luego eliminar estos hábitos. Por
ejemplo. Tomar un café después de comer y otro por la mañana al
despertarte. Puede que lleves haciéndolo toda la vida. Y es genial si te
hace sentir bien, pero: ¿es necesario para tu cuerpo o es un capricho
mental? Imagina que has dormido 9 horas, y te has despertado fresco
como una rosa. ¿Realmente necesitas ese café? ¿Quién pide el café?
¿Tu mente o tu cuerpo? Piensa en ello unos segundos. Sigue leyendo.
Aquí van, a mi juicio, basado en estudios científicos y en mi propia
experiencia, los 7 alimentos o componentes que hay que reducir en la
medida de lo posible hasta eliminarlos completamente de nuestra vida
para curar la gastritis.

Se trata de un sedante más junto a benzodiacepinas y barbitúricos. Se
trata de un depresor del Sistema Nervioso Central. El alcohol etílico o
etanol es la droga que se halla en las bebidas alcohólicas, y existen
otros tipos como el metílico, que se usa industrialmente.
El alcohol etílico se obtiene mediante: La fermentación de frutas,
vegetales o granos en el caso del vino y la cerveza. Y por destilación:
que es un medio artificial para aumentar la concentración del alcohol
de una bebida como en el caso de ginebra, coñac, whisky y vodka.
Al consumir alcohol, el proceso que sigue nuestro organismo es el
siguiente: del estómago pasa al duodeno, que lo absorbe. Después
pasa al torrente sanguíneo que es lo que produce la irritación
estimulando la secreción de jugos gástricos. Esto provoca que se
inflamen el esófago y el estómago, derivando en úlceras y gastritis.
Aparte, un uso continuado de alcohol puede afectar de manera
determinante a nuestra respiración intracelular, la producción de
neurotransmisores y el metabolismo.
Lo más importante que debes recordar cuando vaya a consumir
alcohol, es que vas a irritar la mucosa de tu estómago. Y no sólo eso. El
consumo habitual de estas bebidas te llevará a una gastritis crónica. Y
si eres un amante de la cerveza, lo siento. La cerveza es peligrosa y
dañina en personas con síntomas o infectadas de gastritis. Ya sea sin o
con alcohol. Trata de reducir al máximo su consumo.
Bebidas alcohólicas a evitar o reducir: todas sin excepción. Quizás
las menos malas dentro de las malas serían en este orden: vino tinto
seco o semiseco, vino blanco seco o semiseco.

B. Gluten
Este compuesto del trigo provoca aumento de la permeabilidad
intestinal (que aumenta la probabilidad en el desarrollo de
enfermedades autoinmunes, cáncer, infecciones y alergias) seas o no
seas celíaco, puedes sufrir sus consecuencias. Otros cereales, por su
proximidad en cuanto a composición, también tienen proteínas tóxicas
como la cebada (ingrediente esencial de la cerveza), el centeno y la
avena.
Aunque, la avena es un alimento que bien tratado se puede consumir
sin problemas. Está compuesto por dos proteínas: las gluteninas y
gliadinas. Las gluteninas aportan elasticidad a la masa de pan. Por
otro lado las gliadinas le dan pegajosidad a la masa, al mismo tiempo
que son responsables de su extensibilidad. Por eso puedes extender
la masa y no romperla.
Alimentos con gluten a reducir o eliminar preferiblemente: pasta
blanca, de colores o integral, pan blanco e integral, bollería industrial
(galletas, muffings, pasteles...), pizzas, cerveza, cereales ya sean
integrales o no (tipo muesli).
C. Tabaco
Siento ser pesado, sé que si fumas esto lo habrás escuchado ya mil
veces «tienes que dejar de fumar y el alcohol», pero es que
lamentablemente es cierto. Fumar es una de las peores cosas que
puedes hacer si de verdad te quieres curar. Fumar no sólo ataca al
estómago, sino que también lo hace más débil.
Fumar estimula la producción de ácido basal, por tanto el riesgo de
gastritis. Este aumento de la secreción de ácido gástrico está
orquestada a través de la estimulación de los receptores H2 de
histamina liberada después de la desgranulación de mastocitos y
debido al aumento del volumen celular parietal funcional o capacidad
secretora en los fumadores.
Fumar también aumenta el eflujo de acidos biliares y por tanto aumenta
el reflujo duodenogástrico que eleva el riesgo de gastritis. El
tabaquismo y la nicotina no sólo inducen ulceración, sino que también
potencian ulceración causada por H. pylori.
La nicotina eleva el nivel de vasopresina endógena, que desempeña
un papel muy importante en el desarrollo de las gastritis.
Fumar además hace más débil a tu estómago:
Reducen el nivel de factor de crecimiento epidérmico (EGF) y
disminuyen la secreción de EGF de la glándula salival, que
son necesarios para la renovación celular de la mucosa
gástrica.
También disminuye la generación de prostaglandinas en la
mucosa gástrica de los fumadores.
Y reducen la angiogénesis en la mucosa gástrica a través de
la inhibición de la síntesis de óxido nítrico deteniendo con
ello el proceso de renovación celular.
Poco más hay que añadir.

D. Comida frita
Es muy posible que cuando consumes frituras sientas molestias
abdominales. Dado que contienen altos niveles de grasa. Y
precisamente, esta grasa procedentes de frituras es muy perjudicial
para nuestro estómago. Esto no es negociable. Es importante reducir al
máximo los fritos salvo que estés en un cumpleaños o algún acto social,
pero por norma general, eliminarlos te hará mejorar.
Consumir este tipo de alimentos puede acentuar el reflujo ácido y el
ardor de estómago. Además de causar esteatorrea (significa que
pierdes la capacidad de absorber correctamente los alimentos y por lo
tanto de cumplir la función digestiva normal), que es la acumulación de
grasa en las heces.
Alimentos fritos a disminuir o eliminar: TODOS: patatas fritas,
croquetas, empanadillas, hamburguesas fritas, en general todos los
alimentos rebozados que tengan que ser fritos para consumirse. En su
lugar recurre a la plancha, cocción o vapor.

E. Refrescos y zumos industriales

Todo el mundo a día de hoy, ya sabe que estos no son para nada una
buena fuente de energía y que acarrean múltiples problemas a nuestro
cuerpo. Su alto contenido en azúcar (unos 9 terrones de azúcar por
lata) provoca obesidad y enfermedades relacionadas como la diabetes
o enfermedades cardiacas.
El ingrediente principal de estos refrescos sean light, zero calorías o no
es el agua carbonatada. El dióxido de carbono que contienen causa
gases. Y a la larga pueden aparecer dolores de estómago debido a la
combinación de pH ácido y la carbonación. No lo recomiendo bajo
ningún concepto. Acostumbraremos a nuestro organismo a beber
agua, té o infusiones de hierbas como poleo menta o manzanilla.
En el caso de los zumos, el problema es que contienen un alto grado
de fructosa sin fibra y eso puede dañar tu estómago. Si quieres tomar
algo con fruta, come una pieza de fruta entera, si puede ser con la
cáscara, bien lavada eso sí.
Refrescos a evitar: todos los que contengan gas, sin excepción.
Zumos, todos los que venden en cartón o brick, sólo tomar naturales y
no en abundancia. Es mejor un batido/smoothie de verduras con
alguna fruta, o un licuado de verduras con alguna fruta. Ya que en
estos dos últimos casos habrá mucha menos fructosa y algo de fibra.

F. Café y bebidas con cafeína
Es una pena, porque personalmente me encanta, pero el café contiene
un ácido que se llama ácido clorogénico. Según un estudio publicado
en la revista de medicina "Critical Reviews in Food Science and
Nutrition" en el 2006 para algunas personas, este ácido consumido
habitualmente, puede producir irritación en las paredes del estómago
cuando toman café con el estómago vacío.
Podemos concluir por tanto, que si padecemos de problemas
estomacales, tomar un café diariamente en ayunas no es la mejor idea.
El café tiene cierto efecto adictivo, así que puede que te cueste
prescindir de él, pero has de entender que la gastritis no es una
broma, y al final todo cuenta, lo que queremos evitar en todo caso es
una gastritis severa puede provocar un agujero en la pared del
estómago desembocando en una úlcera péptica, lo cuál es un
problema grave.
Por otra parte, la cafeína estimula nuestro sistema nervioso central. Esta
estimulación provoca que el estómago produzca ácidos a veces en
exceso. Y el exceso de ácidos puede contribuir a la formación de
gastritis.
Así que olvídate de tomar café en ayunas cada día, tómalo de manera
ocasional y nunca con el estómago vacío.

G. Lácteos (no todos)
No todos los lácteos son peligrosos. Hay que priorizar los lácteos
descremados porque favorecen nuestra flora intestinal. El más
beneficioso es el yogur natural sin azúcar. En cuanto a los demás,
habrá que vigilar los quesos altos en grasas al igual que la leche.
Muchos somos intolerables a la lactosa, pero no lo sabemos. Los
lácteos producen indigestión e irritación del estómago. Y lo peor de los
lácteos es que no los notamos en el momento de consumirlos. Es un
alimento que nos hace daño a largo plazo. Que sea recomendable por
algunos médicos para aliviar los síntomas de la gastritis se debe a su
alivio temporal del dolor. Pero propongo priorizar otras fuentes de
proteínas y de carbohidratos antes que esta.
No consumir: Todo producto con lactosa. Sobre todo quesos altos en
grasas como el queso curado, leche entera, semidesnatada o
desnatada, nata, leche condensada.
Sustituir: Podemos sustituir la leche de vaca por leche de cabra,
mucho más sana para nuestros intereses como verás más adelante.

E. La verdadera enfermedad del siglo XXI: El
estrés.
Considero que es, el factor de mayor importancia a la hora de
desarrollar una afección estomacal. La ansiedad se suele desarrollar
después de etapas constantes de estrés.
Estar agobiado es peligroso para nosotros. Un agobio continuado
puede hacernos polvo. Algunos la llaman gastritis emocional. Yo la
llamo gastritis por estrés. Y es que esos problemas que te preocupa, o
que te irritan o te ponen triste pueden llevarte a desarrollar ciertos
hábitos poco saludables.
Por ejemplo, secuestrado por el estrés es posible que empieces a
comer de forma más rápida y en mayor cantidad. Pero no solo eso.
Empiezas a comer porque te sientes triste o aburrido. Además, no lo
estás haciendo porque tu cuerpo lo necesite sino para aliviar
temporalmente el malestar que te genera alguna situación en tu vida.
Por esto el estrés puede destrozarte la vida y por eso lo considero el
factor fundamental a detener. Recomiendo que explores ciertos hábitos
que os desestresen y os hagan felices, como pueden ser masajes,
hidroterapia, música relajante... cada uno tiene su forma, yo
personalmente propongo la meditación y el yoga.
Con tan sólo 20 minutos diarios, alternando la meditación y el yoga,
podrás obtener fantásticos resultados. De hecho, notarás que tu
estado de ánimo no es tan reactivo a las situaciones estresantes de la
vida. Pero quiero que lo pruebes.
Para la meditación, propongo visualizar las respiraciones sin tratar de
manejarlas. Observar simplemente todo lo que piensas sin vincularte
con tus pensamientos y si te encuentras despistado, volver una y otra
vez la atención a un punto fijo. Este punto fijo va a ser la respiración.
Las primeras veces hazlo por 5 minutos, verás lo que cuesta estar
centrado solamente esa cantidad de tiempo.
Trata de reconectar con tu respiración sea como sea esta durante cada
hora de cada día. Que estés en el presente será algo que te vendrá
muy bien a ti a tus familiares.
Sinceramente, en internet hay mucho material aceptable para iniciarse
en meditación. Aunque mi propuesta es que empecéis directamente a
practicar Mindfulness porque es una técnica que mezcla yoga y
meditación.

2) SANA TU ESTOMAGO ¿QUÉ ES LA GASTRITIS?

Esta afección se produce debido a la inflamación de la mucosa
gástrica, lo cuál puede ser debido a diversas razones. Esta mucosa
tiene un papel vital. Es una especie de muro compuesto por células
que protegen nuestro estómago de la acidez que producen los jugos
gástricos. Por lo que es importante mantenerla en un estado óptimo, y
que esté hinchada no es deseable para nadie.





Normalmente, cuando tenemos gastritis podemos sentir malestar en el
estómago, malestar emocional, náuseas, eructamos, tenemos ardor,
reflujo (sensación de que la comida vuelve a subir a la boca).
Para identificar correctamente qué tipo de problema estomacal o
gastritis nos aqueja, opino que lo más efectivo para atajar el problema
de raíz es solicitar una endoscopia. Sé que puede parecer algo duro,
chocante incluso peligroso para algunas personas, pero es necesario
si quieres empezar a sentirte bien.
Estudios han demostrado recientemente que nuestro segundo cerebro
se encuentra en el estómago. Puedes leer más acerca de ello en el
libro "El Segundo Cerebro" de Miguel Ángel Almodóvar, donde se
recogen dichos estudios científicos.
Además, este segundo cerebro se conecta con el primero por vías
nerviosas. Por lo que todo lo que comes y todo lo que utilizas para
nutrir tu cuerpo es tan importante que puede influir de manera
determinante en tu estado anímico. Por lo tanto, en la relación que
mantienes con tus familiares, con tus compañeros de trabajo...etc.
Parece que no, pero esta afección puede ser un lastre si seguimos
tomando pastillas y comiendo exactamente igual que siempre en
cuanto nos sentimos un poco mejor.
Volviendo al tema, una endoscopia va a permitirte localizar
exactamente la ubicación de la inflamación de la mucosa y poder
determinar el tipo de gastritis que padeces, por ejemplo si se trata de
una infección por una bacteria, o por el contrario de una simple y
molesta inflamación crónica.
Estos son los tipos de gastritis que se conocen hasta el momento: la
aguda, la crónica y las poco frecuentes.
Entre las primeras, podemos encontrar la infección aguda por
Helicobacter pylori. En cuanto a las atróficas crónicas podemos
encontrar la tipo A, que es auto inmunitaria o la tipo B que está
relacionada con la bacteria ya mencionada. Por último, entre las
enfermedades poco frecuentes: la enfermedad del crohn es la más
conocida.
Dicho esto, con los remedios naturales que explico y detallo más
adelante, la gran mayoría pueden ser revertidas con buenos hábitos y
constancia. Este no es un libro para soñadores. Es un libro para gente
que se quiere, y que quiere tomar el control y revertir su dolencia de
manera efectiva y de una vez por todas con acción. Pero habrá que
esforzarse, es duro aparcar ciertos hábitos. Para mí lo fue.
Como mencionaba al principio de este texto, una gastritis puede
aparecer en nuestras vidas principalmente por periodos de estrés
prolongados en el tiempo, por situaciones que provocan ansiedad, por
un consumo excesivo de alcohol y/o de tabaco, por una enfermedad
infecciosa, por un déficit en nuestro sistema inmune e incluso por una
infección viral. ¿Estás preparado? Pasa la página si quieres
cambiar radicalmente tu salud.

1) SANA TU ESTOMAGO ¿POR QUÉ DEBERÍAS LEER ESTOS CONSEJOS?

Sanar tus problemas estomacales, te conduce al desarrollo de una
vida óptima.
Me diagnosticaron una gastritis hace dos años. Poco después me
detectaron la bacteria Helicobacter pylori. Pensé que no era grave.
Llegué a comer lo mismo que siempre había comido durante años y
años. Me parecían chorradas, aquellos que decían que nuestro
segundo cerebro está en nuestro estómago y que influye notablemente
en nuestra mente. Así que lo hice.

Empeoré la salud de mi estómago gracias a la potente combinación de
fármacos «pensados para» paliar la infección y seguí llevando a cabo
ciertos hábitos alimenticios adquiridos a lo largo de mi adolescencia y
principios de mi vida adulta (cenar pizzas y cervezas todos los fines de
semana, consumir varios cafés al día, comer rápido y mucho porque no
tenía tiempo para hacerlo despacio, comerme los bollos más grandes
posibles que existiesen etc.)
Actualmente, soy graduado en psicología y autodidacta en temas de
nutrición, a base de leer muchos artículos y estudios a lo largo de estos
años.
He decidido escribir este libro porque mi salud ha mejorado
enormemente sin ayuda de fármacos, porque la comida ha sido un
factor decisivo en la mejora, porque he adquirido conocimientos que
pueden ayudarte a comprender por qué las infecciones estomacales
son tan importantes en nuestras vidas y porque quiero que despiertes
y no te pase lo que me ha pasado a mí.
Quiero que seas consciente del daño que te estás haciendo porque yo
ya he pasado por ello. Ponte las pilas. Se puede revertir la gastritis y
muchas otras infecciones estomacales. Hablo de sanarlas al cien por
cien. Pero tienes que esforzarte.
La gastritis se puede considerar a día de hoy, una de las
enfermedades estomacales más conocidas y frecuentes de este siglo.
El estrés, la ansiedad, ciertos hábitos alimenticios, el consumo de
tabaco, son entre otros, los culpables de ese incómodo y para algunos,
insoportable ardor o hinchazón que sacude nuestro estómago.
Esta afección está arrasando en las sociedades modernas debido al
terrible estrés al que estamos sometidos día tras día. El constante
bombardeo de información vía smartphones, tablets, televisión, las
exigencias del trabajo, el poco tiempo para nosotros mismos, la crisis
económica mundial son ejemplos de fuentes de estrés. Este estrés se
acentúa más si debido a la falta de tiempo empezamos a comer más
deprisa, sin prestar mucha atención a qué comemos y cómo lo
comemos.
Todo esto termina en un bucle. En el que nos metemos de lleno, porque
comer cualquier cosa ligera y rápida nos permite salir al paso hasta
que llega el día en que toda esa rapidez pasa factura y tu cuerpo da
señales de que algo no va bien. Ese día, decides ir al médico porque te
arde el estómago. Normalmente tras una copiosa cena entre amigos un
viernes por la noche. Y el médico tiene la receta mágica a todos tus
problemas. Te receta un tratamiento de pastillas, unas 3 o 4 de
diferentes tipos durante 21 días. Y una vez que terminas, estás como
nuevo. Pero no. No es así.
Lo que suele pasar es que la afección vuelve con más fuerza y las
pastillas se convierten en un elemento indispensable. Pasan los meses
y tu estado no mejora. Quieres seguir comiendo lo que antes, tener los
excesos de antes y pensar que todo está bien mientras tengas esas
pastillas. Lo que no sabes es que esas pastillas son un alivio temporal.
Esas pastillas aplazan tu dolor por unas horas. Lo que yo te propongo
no es aplazar el dolor. Te propongo eliminarlo.
Y no por arte de magia con unas hierbas, o con un novedoso fármaco.
Te propongo eliminarlo con comida real y de verdad. Te propongo que
tomes acción en tu vida, que tomes consciencia de lo que comes, de
qué hábitos están haciendo polvo tu estómago y los aceptes. Que seas
capaz como mínimo de mejorar tus síntomas hasta niveles que van a
sorprenderte. Yo ya lo he hecho, y sigo haciéndolo.
El estómago es un órgano que como más adelante explico, está muy
relacionado con nuestra mente. En función de cómo se encuentre
nuestro estómago, nuestro intestino, así nos encontraremos nosotros.
Hablo de la flora intestinal. La flora, se denomina también biota
intestinal, y hace referencia al conjunto de bacterias que viven en el
intestino. Estas bacterias nos acompañan toda la vida y la gran mayoría
de ellas son muy beneficiosas y no dañinas para nosotros. De hecho,
se cree que tan sólo 100 de 2000 de ellas son perjudiciales.
Dicho esto, si la flora intestinal se desequilibra debido al consumo de
alimentos poco favorables para ella (bollería industrial, pizzas
procesadas, embutidos, fritos...), lo más probable es que tu intestino
conecte con el cerebro y este reciba señales de que algo no va bien.
Esto influye de manera potente en nuestras emociones. Y esto es algo
que poca gente sabe: lo que comes, influye de manera determinante
en cómo te sientes. Y cada vez están saliendo más estudios que
corroboran esto, aunque aún quedan muchas cosas que aclarar.
Así que tienes dos opciones. Cerrar este libro ya, seguir comiendo lo
que comes, seguir tomando 4 pastillas diarias y seguir teniendo esos
altibajos emocionales que están mermando tus relaciones con las
personas que quieres.




O bien puedes experimentar cómo es la vida con comida real. Cómo
puedes cambiar ciertos hábitos perjudiciales y cómo a raíz de esto
puedes comprobar que tu estado de ánimo mejora. Y con ello, tus
relaciones con los demás.